Karl Anderson
tuvo un derrotero coherente y agradable desde Long Island hasta éste presente
multimillonario con una firma de lujo. Nacido en 1959, creció en una familia
que giraba en torno a la moda y la industria textil; añadiendo a éste escenario
su gusto por el dibujo, el diseño de modas iba a ser algo inevitable, tal cómo
él mismo ha expresado.
Comenzó
convirtiendo el sótano de la casa de Long Island en una boutique llamada “Iron
Butterfly” en dónde vendía prendas confeccionadas por él. Más tarde estudió
durante un tiempo en el Fashion Institute of Technology, pero no terminó la
carrera, se dedicó, en cambio, a diseñar una línea para las tienda Lothar, para
después ocuparse de diseñar, vender y hasta armar la vidriera de la misma con
total libertad. Dos años después, con 21 años y a instancias de Dawn Mello (Bergdorf Goodman), comenzó a trabajar en una
colección propia, lanzó su marca en 1981 y tanto Bergdorf Goodman como Saks
Fifth Avenue la compraron en su totalidad.
En 1997 ficha para Céline como director creativo, puesto en el que se
mantiene hasta el 2004. Tal vez éste período terminó de cerrar lo que sería el
estilo de Michael Kors: ya había sido catalogado como “Sport de Lujo”, pero
ahora, sumada la influencia europea, Kors aunaba lo mejor de dos mundos: la
practicidad estadounidense con el lujo de sangre azul europeo. Tras el retiro
de Céline se centra por completo en su marca, la cual en el 2001 había lanzado
una línea de accesorios, en el 2002 la línea masculina y en el 2004 la línea
deportiva.
Éste recorrido ha sido galardonado en varias oportunidades: en 1983, a
dos años de lanzar su marca, recibe el DuPont´s First American Original Award, en
1997 es galardonado con el CFDA como Diseñador del Año; repitió en el 2001 pero
en la categoría “Diseñador de Complementos del Año” y es que ¿quién no quiere
uno de sus magníficos bolsos, carteras, zapatos o relojes?
Es interesante (y apropiado) su rechazo a quienes categorizan sus
diseños dentro del minimalismo, por lo expuesto anteriormente, si bien es
cierto que sus líneas son puras y sus colores básicos, con un acercamiento
claro a Dona Karan o Calvin Klein, pero lo cierto, y aquí es dónde el ojo
avezado nota la diferencia, es que Kors le suma un Lady Like al modo de Grace
Kelly (o de Jackie O., o la gloriosa dentro del estilo Audrrey Hepburn).
Éste mix
de estilos queda plasmado en su propuesta de Otoño 2014: en su back decía “El
Gran Sur se junta con la Gran Ciudad”. En la traducción nos encontramos con el
encuentro de dos décadas, dos escenarios perfectamente integrados: el lady like
de los 50´más el boho de los 70´:
Sweaters,
flecos de gamuza, bufandas interminables, mucha lana, remeras de un algodón
excelente, cinturones de distintos anchos a la cintura, vestidos vaporosos,
tapados oversize y mucho marrón y gris es la forma de Kors de mostrarnos como
ésta combinación es posible en su universo. Nuestro consejo, ir a nuestro
armario para ver qué prendas nos ayudan a lograrlo y en nuestros propios
términos. Es un excelente ejercicio para familiarizarnos con algo tan cotidiano
como el vestir.
María de la Cruz Rojo
Croix Asesoramiento de Imagen
Fuentes
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