Mientras acuden a mi mente imágenes
de la película “Bleu” de la trilogía de Kieslowski (1), me pregunto por qué
hemos elegido hablar del color azul, su simbología y aspectos
psico-sociológicos, y encuentro respuesta en su ambigüedad: “Paradójicamente, es el único de todos los
colores que con toda legitimidad puede ser visto como próximo a, y al mismo
tiempo esencialmente símbolo de, tanto la oscuridad como la luz (…) Puede opacarse, puede hacerse oscuro, puede
flotar aquí y allá como una bruma, evocar serenidad y poder. Reflejándose el
uno en el otro, el mar toma su color del cielo.”(2)
Ante tal espectro tonal, no es de
sorprender que nos encontremos ante simbolismos variados, si bien en líneas
generales es un color conservador que representa confianza, compromiso,
respeto, fe, espiritualidad y devoción y energéticamente es el color que invoca
protección: “es el símbolo de los
varoncitos en América y del luto en Borneo, de las tribulaciones para el indio
americano y de la dirección sur en el Tibet. El azul indica misericordia en la
Kábala y monóxido de carbono en las garrafas de gas. Los emperadores chinos
vestían de azul para venerar al cielo. Para los egipcios representaba virtud,
fe y verdad. Vestían de ése color los esclavos en la Galia. Era el color del
sexto nivel del Templo de Nabucodonosor II, consagrado al planeta Mercurio. En
Jerúsalen, una mano azul pintada sobre las puertas brinda protección. Un punto
azul colocado detrás de la oreja de un novio en Marruecos desbarata el poder
del mal y en África Oriental las cuentas azules representan fertilidad (…) el
equivalente, en el círculo cromático, de la moderación, la templanza, el recato
en la mirada.”(3)
Especificando en su espectro, tenemos que el azul oscuro o marino connota autoridad y respeto, siendo adecuado incluso para
el luto, el traje azul implica seriedad y compromiso, de ahí que sea el
preferido de los políticos, sobre todo en época de campaña. Sin embargo, en las
mujeres denota cierta rigidez. El azul
noche es un azul tan oscuro que puede confundirse con negro, es elegante y
misterioso. Es una magnífica base para todos los colores, incluso otros tonos
de azul y si bien desde el punto de vista simbólico se acerca al azul marino,
es mucho más distinguido y refinado. El azul
índigo a su vez, se asocia con la mente superior, la intuición y la
expansión de la consciencia, es sedante y favorece la inspiración profunda, es
un color favorable para las condiciones de stress e insomnio, cuyas frecuencias
más altas se perciben como violeta y las más bajas como azul medio y claro
(fenómeno que no deja de extasiarnos). El azul
eléctrico es – claro- muy vibrante y energético. Es muy adecuado para uso
social nocturno, ya que, a pesar de la oscuridad, tiene luz y vibración
propias. El azul claro simboliza
espiritualidad y bondad. Connota sensibilidad, optimismo y devoción. En casos
de mucho stress, transmite calma hacia el afuera.
A partir éste repaso somero de
las cuestiones simbólicas, queremos agregar algunas sugerencias de uso que
relacionan las primeras al aspecto psicológico:
Usamos azules profundos para
proyectar autoridad, los azules medios inspiran confianza y lucen “amigables”.
Evitamos el azul en reuniones escolares en las que queramos proyectar éxito y
confianza; en conferencias de banqueros, abogados, contables o vendedores de
seguros, a menos que nuestro objetivo sea no
destacar. Tampoco es recomendado para situaciones de uso tales como
lanzamientos creativos en relaciones públicas, publicidad, diseño y /o
comercialización. Aparentemente, ciertos sectores de los considerados “creativos”
no se relacionan con el azul.
A nosotros, sin embargo, nos
encanta transitarlo y vivenciarlo desde su misterio hasta su serenidad. Sentimos que, como escribió el poeta, “el azul es el verde
que se aleja”. (4)
María de la Cruz Rojo
Croix Imagen
Notas
(1) Nos referimos a Trois Couleurs, “Blue”, “Blanc”, “Rouge”, trilogía de Krzysztof Kieslowski, en referencia a los colores de la bandera francesa y cuyos argumentos parten de sus ideales revolucionarios.(2) Alexander Theroux, “Los colores primarios, Tres ensayos”, pag.4.
(3) Ibid, pag. 5, 6 y 8.
(4) Elías Nandino, magnífico poeta mexicano.
Bibliografía
Aubele, Carolina: “Secretos del
Vestidor”, Buenos Aires, Aguilar, 2012 (reimpresión de la 1° edición)
Spillane, Mary – Sherlock, Christine:
“Color Me Beautiful Looking Your Best”, Madison Books, 1995
Theroux, Alexander “Los Colores Primarios,
Tres Ensayos”, Buenos Aires, La Bestia
Equilátera, 2013